En Villamayor de Calatrava, la cencerrada y el candelicio se celebran con un calor que va más allá de las llamas de su monumental hoguera.
Este evento no solo simboliza la purificación y el inicio de un nuevo ciclo, sino que también reúne a la comunidad en torno a tradiciones que han sido el alma del pueblo durante generaciones.
A través de la cencerrada se recorre el pueblo en una especie de llamada a el candelicio, la construcción de una hoguera con leña aportada por los vecinos, y el compartir de un chocolate caliente preparado por las manos expertas de la Asociación de Amas de Casa. Villamayor de Calatrava demuestra cómo el respeto por el pasado y la unión en el presente pueden forjar un futuro prometedor.
Este año, la festividad ha brillado con especial intensidad, recordándonos la importancia de mantener vivas nuestras tradiciones como una riqueza invaluable que nos hace únicos.